En los últimos diez años el número de alumnos chinos en nuestras universidades se ha multiplicado por diez, cada curso llegan seis mil alumnos del país asiático.
Vienen más porque hay un acuerdo que les facilita la cuestión burocrática del reconocimiento del título. También por la calidad de nuestras universidades y porque les resultan más baratas que las mejores de China.
Los grados de Comercio y Turismo son sus preferidos y aunque vienen con un nivel muy bajo de español, su dedicación a los estudios es destacable y apenas faltan a clase.
Existen programas para mejorar su formación. Los alumnos españoles les ayudan con las materias y ellos les enseñan chino. La mayoría vuelven a China cuando acaban sus estudios. Otros deciden quedarse porque ven una oportunidad de trabajo en las incipientes relaciones entre ambos países.
Fuente Antena3
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